Todos tenemos la visión onírica de las películas en que las personas se levantan frescas y lozanas por la mañana. Sin embargo, la realidad es bien distinta. El pelo alborotado, los ojos hinchados o el mal aliento son algunos de los síntomas reales que padecemos cada día cuando suena el despertador. Al mirarnos en el espejo podemos ver los efectos físicos, pero los problemas con nuestro olor bucal son más difíciles de detectar. Como una de las clínicas dentales en Madrid a precios asequibles hemos detectado muchos casos de pacientes que se muestran inquietos por este factor.