Disgeusia: ¿quién trata la pérdida o alteración del sentido del gusto?

Fue uno de los síntomas más evidentes de haber contraído la COVID-19, especialmente durante las primeras etapas en las que las variantes de este virus solían provocar una pérdida del sentido del gusto.

Normalmente, era algo temporal asociado al propio desarrollo de la enfermedad. Una vez superada, el sentido del gusto se recuperaba en la mayoría de los casos. Aunque algunos pacientes se quejaban de no recuperarlo en su totalidad, notando algunas alteraciones y diferencias al degustar ciertos alimentos.

Sea por haber sufrido esta enfermedad o sea por otros motivos, ¿a qué profesional hay que acudir cuando se sufre de disgeusia? Te lo contamos a continuación.

¿Qué es la disgeusia?

La disgeusia debe definirse, más que como una pérdida del sentido del gusto, una anomalía en la percepción de los sabores de los alimentos y bebidas que se ingieren. Quien la padece, a veces no percibe ningún sabor y, en otros casos, percibe los sabores alterados, con menor intensidad o sin distinguirlos plenamente.

En muchas ocasiones, cuando se sufre disgeusia también se puede experimentar el llamado “síndrome de la boca ardiente”, que resulta especialmente molesto porque provoca una especie de ardor constante en la cavidad bucal. Otras veces, este problema causa una sensación permanente de sabor metálico o un mal sabor de boca general que afecta a todo aquello que se come o se bebe.

En definitiva, la disgeusia provoca una sensación rara y genera un sentimiento de impotencia ante la imposibilidad de disfrutar de la ingesta de alimentos como antes.

Tipos de disgeusia

Como decíamos, aunque se suele generalizar y hablar de “pérdida del sentido del gusto”, la disgeusia es una alteración más compleja, que puede dar lugar a diferentes síntomas al existir cinco tipos diferentes:

1.- Parageusia: provoca la confusión de sabores, por ejemplo, entre dulces y salados.

2.- Fantogeusia: deja un constante sabor amargo en la boca.

3.- Ageusia: pérdida completa del sentido del gusto.

4.- Hipogeusia: los sabores pierden intensidad y parece que todo sabe “menos”.

5.- Hipergeusia: percibir los sabores de manera excesivamente intensa.

¿Quién trata la disgeusia?

Al ser sus causas tan dispares, lo más recomendable cuando el trastorno se prolonga en el tiempo es acudir a un otorrinolaringólogo para que realice una primera exploración y valoración. Esta especialidad cuenta con pruebas específicas para poder valorar y medir la percepción de los sabores que experimenta un paciente.

En función del resultado, se podrá aplicar un tratamiento u otro, aunque, normalmente, ninguno está en manos de los especialistas de nuestra clínica dental en Madrid centro. La presencia de tumores, trastornos neurológicos y otras enfermedades como la diabetes suelen estar detrás de un problema que, aunque pueda parecerlo, no es de origen bucodental. Por eso te recomendamos acudir a este profesional. De todas formas, si comienzas a notar este fenómeno, no dudes en comentárnoslo en la próxima consulta que tengas con nosotros en tu Centro Dental Lavapiéso si se trata de una consulta odontológica general o relativa a implantología en Madrid.