La lengua, clave en la higiene bucodental

Como especialistas en implantes en Madrid no nos cansamos de repetir a nuestros pacientes que la lengua es un órgano clave del que no nos podemos olvidar a la hora de lavarnos la boca. Date cuenta de que en ella se acumulan gran cantidad de bacterias orales. Por lo tanto. ¿qué hábitos de higiene y limpieza implementar para mantenerla a raya? Los vemos en las siguientes líneas.

Lo primero que tenemos que tener claro es que merecen la debida atención tanto los dientes y el tejido gingival como la lengua. Una higiene deficiente en este sentido puede derivar en la aparición de halitosis. Además, no hay mayor problema ya que en el mercado tienes a tu disposición herramientas específicas que te facilitarán la higienización de este músculo.  En el Centro Dental Lavapiés te diremos qué tipo de limpiadores linguales elegir. Te permitirán alcanzar zonas de difícil acceso gracias a su forma arqueada. Normalmente tienen dos caras. Una lisa para higienizar los laterales de la lengua y otra de perfil ondulado para adaptarse a la depresión central.

Pasos a seguir en la limpieza de la lengua

1. Limpia la zona central de la lengua: la superficie arqueada del limpiador lingual ha de quedar boca abajo. Alcanza la zona trasera de la lengua y después vete hacia la punta.
2. Usa la cara lisa para limpiar los laterales de la lengua.
3. Enjuaga la boca con abundante agua para eliminar las partículas que se hayan liberado durante los pasos anteriores.

Algunos cepillos de dientes llevan en la parte posterior un limpiador diseñado para eliminar las bacterias de la lengua. De todos modos, la lengua también se puede limpiar con las cerdas del propio cepillo. Date cuenta de que, las bacterias de la lengua, además de causar halitosis como decíamos antes, pueden desplazarse por el resto de la boca y llegar a los dientes generando caries o gingivitis. Así que no podemos olvidarnos de incluir la lengua en nuestra rutina de higiene bucal diaria para disfrutar de una sonrisa sana y bonita. Porque nuestra rutina de higiene bucal incluye el uso de cepillo, hilo y enjuague no solo para limpiar las piezas dentales, sino el conjunto de la cavidad.