¿Reemplazará la ortodoncia invisible a los brackets?

Si has leído con atención nuestros post anteriores, sabrás que los tratamientos de ortodoncia invisible en Madrid son una opción cada vez más demandada por las personas que quieren mejorar su dentadura. La cuestión es si estos van a llegar a desplazar totalmente a los clásicos brackets metálicos. Ahondamos en el tema en las siguientes líneas.

Lo primero que no se puede negar es que la ortodoncia invisible es una alternativa mucho más ventajosa desde el punto de vista estético. La ortodoncia sin brackets, esos alineadores transparentes hechos de un plástico especial, son cómodos y de fácil uso y limpieza. Aunque la marca Invisalign fue pionera en este tipo de ortodoncia, a día de hoy hay otras firmas en el mercado como Alineadent, Clear Aligner o Inviflex.

Para resolver la duda de si acabará por desplazar del todo a los metálicos, lo que hemos de hacer es poner en valor las ventajas de la ortodoncia invisible. Teniendolas bien claras obtendremos la respuesta.

La primera de esas ventajas es que los resultados de este tipo de correctores son perceptibles en menor tiempo que con otros tipos de brackets. Además, es tremendamente fácil quitarlos y ponerlos. En cuanto a la duración del tratamiento, ahí tenemos el siguiente motivo por el que la ortodoncia invisible acabará siendo la opción predominante: Invisalign, por lo general, tiene una duración inferior a los brackets metálicos. Obviamente, todo depende del tratamiento que conlleve tu proceso, pero suele ir entre 7 y 18 meses. En Centro dental Lavapiés estudiaremos cada caso de forma individual.

Otro gran punto a favor es que es una alternativa mucho más atractiva para los adultos. Está claro que los niños tienen menos problemas por llevar brackets metálicos. Pero muchas veces personas ya en la edad adulta evitan estos tratamientos por temas de autoestima. La ortodoncia invisible y su absoluta discreción es la solución ideal para ellos. Además, como se puede quitar, permite comer y masticar sea lo que sea y después cepillarse los dientes cómodamente. Por todo lo anterior, por sus grandes ventajas y efectividad, podemos decir que sí, que llegará un momento en que la ortodoncia invisible haya desplazado totalmente a la convencional.